Rinde informe líder de Convergencia, Mario Mendoza Flores

Comité Directivo Estatal Oaxaca; Diciembre 2008-Julio 2010.- I.Convergencia 2010, promotor del cambio en Oaxaca. En 2010 son muchos los motivos que tiene Convergencia para celebrar: Una votación histórica en términos reales (no por asignación en convenio) del 3.83% que lo ubica como la cuarta fuerza política del estado y que le permite conservar su registro a pesar de las maniobras gubernamentales en contra;  la consecución –por primera vez–  de dos diputaciones estatales de mayoría relativa y una más por la plurinominal con candidatos propios, el triunfo en cuatro de los 11 ayuntamientos en que se propuso candidato a primer concejal y, por supuesto, haber respaldado e impulsado la candidatura de hoy Gobernador Electo, Lic. Gabino Cué Monteagudo, cuando institutos políticos de la misma coalición hacían propuestas distintas y con ello haber conseguido la transición democrática tan anhelada por el pueblo de Oaxaca.
Hoy con enorme satisfacción se puede aseverar que Convergencia estuvo a la altura de las circunstancias que la ciudadanía demandaba, acatando en todo momento su mandato y blindándolo de filtraciones e intromisiones ajenas y externas.
Luego de la derrota registrada  por los partidos de oposición las elecciones federales del 5 de julio de 2009, donde el Partido Revolucionario Institucional arrasó en los 11 distritos que corresponden al estado de Oaxaca, Convergencia fue la primera fuerza política que convocó a una gran alianza de partidos de oposición en el estado cuyo propósito fue el de enviar el mensaje a la sociedad civil organizada, de que la única forma de alcanzar la transición democrática  en el estado era a través de la unión de las  fuerzas políticas de oposición.
Así, desde el 6 de julio de 2009, un día después de conocer los resultados electorales que consolidaron un dique para el avance democrático del estado, la dirigencia del Comité Directivo Estatal (CDE) convergente, presidida por Mario Arturo Mendoza Flores, inició el diálogo con sus contrapartes de los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática y del Trabajo. 
Firmes en su convicción de ser diferentes e independientes, pero comprometidos con la fuerza política que exigía aprovechar esta oportunidad histórica para lograr la renovación de la relación gobierno sociedad en el estado, estos partidos priorizaron las coincidencias sobre las ideologías.
Y es que luego de que en 2006 se consiguieran resultados positivos en la elección presidencial –donde Convergencia obtuvo tres diputaciones federales y la senaduría del Lic. Gabino Cué Monteagudo–, las opciones partidistas estatales quedaron enfrascadas en una discusión estéril que podría solucionarse únicamente obedeciendo lo que fue una exigencia ciudadana, la unión.
Fue primeramente el diálogo entre Mendoza Flores y Carlos Moreno Alcántara, dirigente albiazul estatal, como se iniciaría la búsqueda de un consenso que permitiera reactivar las opciones políticas en el estado de Oaxaca, que en ese entonces tenía ya cumplidos 80 años bajo un mismo cacicazgo, un grupo de poder autoritario que desdeñaba las expresiones sociales y era incapaz de solucionar problemas de diversas índoles.
Posteriormente, el diálogo se abrió de forma directa tanto con el líder estatal perredista, Amador Jara, como con el coordinador político del PT, Daniel Juárez. No obstante, el proceso de consolidación de una coalición plural y democrática no avanzó sin contratiempos tanto externos como internos. A nivel nacional, con un Partido Revolucionario Institucional que pretendía que los 14 comicios estatales de 2010 fueran un “paseo”, en palabras de su dirigente nacional, la presión en contra de las coaliciones “antinaturales”, “antidemocráticas” y “perversas” no fue solo mediática, sino política.
Sin embargo, las críticas vertidas en medios de comunicación desde las cúpulas priistas nacional y estatal, así como desde las cámaras de Diputados y de Senadores significaron la preocupación tricolor que indicaba que el cambio democrático se encontraba en un camino correcto.
Asimismo, al interior de la coalición se barajaron diversos nombres para encabezar la candidatura al gobierno, ante lo cual la postura de Convergencia fue siempre respaldar la figura de Gabino Cué Monteagudo, con quien no sólo se había conseguido en 2001 ganar la capital del estado, sino en 2004 se dio vida a un nuevo proyecto al cual un fraude electoral negó el triunfo que los oaxaqueños ya habían acreditado.
Conociendo la trayectoria transparente y honesta que  como presidente municipal y senador conformó Gabino Cué, Convergencia persistió para que se respetara su candidatura, la única con suficiente fuerza para contender contra lo que se preveía como una elección de Estado comandada por uno de los operadores políticos más impugnados, cuestionados y eficaces del país, Ulises Ruiz. 
Si bien se respetaron las propuestas de personajes como Carlos Altamirano Toledo, Huberto Aldaz, Gerardo García Henestrosa, Irma Piñeyro y de Pablo Arnaud, a quienes incluso se les invitó a formar parte de los trabajos de la coalición, las encuestas determinaron que la figura mejor posicionada entre los oaxaqueños era la del entonces aún senador convergente.
La insistencia del CDE naranja rindió frutos y el 11 de febrero de 2010 el Instituto Estatal Electoral de Oaxaca registró a la coalición Unidos por la Paz y el Progreso bajo solicitud de los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática, del Trabajo y  Convergencia con una única precandidatura, la de Cué Monteagudo.
   II.            2007-2010, consolidación del proyecto socialdemócrata
La consolidación de la coalición Unidos por la Paz y el Progreso y su posterior triunfo electoral fueron el colofón de un trabajo iniciado en 2007 con la nueva dirigencia de Convergencia en el estado, con Mario Mendoza Flores como presidente, Víctor Hugo Alejo Torres como secretario general y Benjamín Robles Montoya como Presidente del Consejo Estatal.
El reto era recuperar la credibilidad de la ciudadanía que se había perdido tras procesos electorales en los que disputas entre partidos devolvieron al autoritarismo al estado.
En el estado son cuatro los principales logros conseguidos a partir del año 2009: Primero, haber blindado el partido de la infiltración oficial que históricamente había maniatado a partidos de oposición en Oaxaca; segundo, la defensa de la propuesta de Gabino Cué Monteagudo como candidato y figura central de la renovación democrática en Oaxaca.
En tercer puesto se encuentra la apertura de Convergencia a las propuestas ciudadanas, con lo cual no sólo se incrementó el número de afiliados en Oaxaca, sino que muchas iniciativas de los oaxaqueños se canalizaron en el Congreso del Estado a través de los legisladores naranjas de la LXI legislatura. Y, por último, el haber conseguido como partido de oposición, la gubernatura en el estado.
Asimismo, para 2010, en la consecución de triunfos electorales tanto en las votaciones para diputados como de presidentes municipales se consiguió que tanto los cuatro ediles que propuso el CDE Convergente, así como los tres legisladores que conformarán la bancada legislativa naranja fueran figuras con trayectoria partidista.

1. III.            Elección 2010

• Gobernador

En la elección para gobernador Convergencia obtuvo una votación histórica con más de 50 mil votos contabilizados a través de esta instituto para el candidato de la coalición Unidos por la Paz y el Progreso, Gabino Cué Monteagudo.
En los distritos correspondientes a Oaxaca de Juárez Sur (I) y Norte (II) los porcentajes alcanzados fueron de 16.02 y 18.55% respectivamente, superando en conjunto los 20 mil votos, es decir, una cuarta parte del total de sufragios que favorecieron el proyecto de transición en la capital del estado.
Asimismo, en los distritos electorales de Etla, Ixtlán, San Juan Bautista Tuxtepec y Juchitán de Zaragoza se rondó la barrera de los 10 puntos porcentuales, asegurando para la coalición alrededor de 12 mil 594 votos más.
Tlacolula, Miahuatlán, Pochutla, Pinotepa, Tlaxiaco, Ocotlán y San Pedro y San Pablo Ayutla se superó la votación histórica de Convergencia al pasar los 5 puntos porcentuales, con lo que se consiguieron 9 mil 523 votos más. 

• Diputaciones locales

En la elección para diputados locales Convergencia consiguió también un máximo histórico al haber obtenido el 8% de los sufragios de la coalición Unidos por la Paz y el Progreso. De un total de 687 mil 418 votos, 56 mil 109 fueron sufragios naranjas, es decir, el 8% del total.  
Asimismo, respecto al porcentaje de votación plurinominal Convergencia obtuvo el 3.98%, con lo que se obtuvo un escaño más en la Cámara de Diputados.

• Votación en los municipios

Convergencia presentó candidatura a presidente municipal en 11 de los 152 municipios que se rigen por usos y costumbres, de los cuales se obtuvieron cuatro victorias:

• Ø En San José Chiltepec, liderando la votación con 1604 votos de los 2069 que obtuvo la coalición en el municipio, el 77.52% de la votación total.
• Ø Valle Nacional, donde se obtuvieron 870 votos de los 6883 con que se ganó el municipio, es decir el 12.63%.
• Ø En Santa Cruz Amilpas se obtuvieron 705 de los 2577 votos con que la coalición por la Paz y el Progreso triunfó en ese municipio, el 27.35% de la votación.
• Ø Santo Domingo Zanatepec se ganó con 1553 votos convergentes, el 41.76% de los obtenidos por la coalición.

Asimismo, en municipios no encabezados por Convergencia se aportaron porcentajes importantes a la votación del 4 de julio.

• Ø En Oaxaca de Juárez, la coalición obtuvo 54 mil 454 votos, de los cuales el 15.77%, es decir 8 mil 588, fueron a favor de Convergencia. 
• Ø En Tuxtepec, de los 21 mil 452 votos con que se obtuvo al presidencia municipal, Convergencia aportó  mil 655.
• Ø En Santa Lucía del Camino el 15.94% de la votación total fue a favor de nuestro instituto.
• Ø En Santa Cruz Xoxocotlán Convergencia aportó el 7.27% de la votación con que se ganó el municipio.
• Ø En Santa María Huatulco, el 10.62% de la votación fue Convergente.Asimismo, en otros municipios como la Villa de Etla, Zaachila y Zimatlán de Álvarez la votación de Convergencia superó el 5% del total obtenido por la coalición.