Alejandro Díaz Hernández llegó envuelto en el escándalo; la noche que supo que ganó fue encontrado por elementos de la policía municipal en una comprometedora situación, y al enterarse su esposa enfrentó serios problemas.
Por: Filadelfo FIGUEROA.
Todo parecía que el asunto iba a ser superado, pero en la población se sabe que Leal Díaz tan pronto llegó al poder y se relacionó con la hija del alcalde, Roberto García Santiago.
Puede ser que la vida privada del presidente municipal de Santa Lucía del Camino debe ser respetada, el problema es que cuando era candidato dijo que provenía de una honorable familia, y que se conduciría con respeto.
El surgió del casco, de donde siempre han surgido los presidentes municipales en este municipio conurbado a la capital oaxaqueña.
Lo grave es que la conducta del edil se ha reflejado en su administración, no hay transparencia en el manejo de los recursos y en tres años creció el número de prostíbulos y lugares donde expenden droga.
Tan es así que a Santa Lucía del Camino ya le quitan lo Santa, porque de eso ya no le queda nada; muchos bromean de esa manera y se lo deben al edil Alejandro Díaz Hernández.
Los ciudadanos denuncian que hoy en Santa Lucía existen más cantinas y prostíbulos que escuelas.
El diputado Wilfredo López Vásquez denunció en el Congreso del Estado la corrupción del presidente municipal de Santa Lucía del Camino, solicitó la desaparición de poderes.
A la fecha la solicitud sigue ahí en la Comisión de Gobernación, donde la bancada priísta hace todo para proteger a Díaz Hernández, con un alto costo, ser señalados de cubrir actos de corrupción.
