*Exigen justicia para Bernardo Vásquez, Rafael Vicente Rodríguez y Catarino Torres Pereda. *Demandan la presentación con vida de Carlos René Román, Víctor Yodo, Modesto Patolzin.
Por: Jesús Isaac OLMEDO
Tras el homicidio del activista Bernardo Vásquez Sánchez, integrantes de la Sección 22 del SNTE y de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) instalaron un campamento de denuncia frente al Palacio de Gobierno para demandar justicia.
Cerca de 14 organizaciones sociales y colectivos levantaron la voz para exigir el esclarecimiento del homicidio del dirigente de la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán, crimen del que responsabilizan a la empresa minera de origen canadiense Cuzcatlán.
Pero también solicitan la desaparición de poderes del municipio de San José del Progreso Ocotlán, pues acusan que el edil Alberto Mauro Sánchez de manejar a un grupo de sicarios, quienes también son señalados de dar muerte al activista.
Por su parte, Marcelino Coache Verano, representante del Frente Común Contra el Terrorismo de Estado, condenó el asesinato de Vásquez Sánchez y de otros dirigentes sociales que han sido silenciados por señalar los abusos y excesos del gobierno.
En este contexto, recordó que apenas el 24 de diciembre del año 2011, también fue ejecutado el profesor Rafael Vicente Rodríguez, dirigente del Frente Amplio de Comunidades Marginadas del Estado de Oaxaca (FACMEO), sin que hasta el momento se esclarezcan los hechos.
Otro caso dijo que es el homicidio de Catarino Torres Pereda, líder del Comité de Defensa Ciudadana (CODECI), ocurrido el 22 de octubre del año 2010, en la Ciudad de Ixtepec, Oaxaca, crimen que no ha sido investigado.
A estos lamentables hechos, sumó la desaparición forzada del profesor Carlos René Román Salazar, quién fuera un destacado miembro de la Sección 22 del SNTE y que fue levantado el pasado 14 de marzo del año 2011.
También mencionó a los maestros Víctor Yodo, Modesto Patolzin, entre otros, que han padecido la represión del Estado en los años 80`s y 90´s. Mientras que en el 2006, recordó que más de 26 oaxaqueños fueron asesinados, 250 detenidos y torturados por el Gobierno de Ulises Ruiz, pero no hay detenidos.
