Exigimos al Congreso del Estado cite a comparecer al Procurador General de Justicia para que informe públicamente su inactividad y dilación evidente del acceso a la Justicia al menor victima de Pederastia.
µ Exhortamos a la Jerarquía Católica, ponderar el interés superior del menor y tomar cartas en el asunto separando del Cargo al sacerdote Gerardo Silvestre Hernández involucrado como señal contundente de cero tolerancia a esta práctica.
µ Le exigimos al Gobierno que al menos en este tema deje la simulación y garantice la protección y no presión en contra del menor y a la familia para puedan proseguir con su denuncia.
El día 19 de Mayo se hizo pública la denuncia de un caso más PEDERASTIA, situación que no es aislada, conductas aberrantes y denigrantes por parte de personajes de la Jerarquía Católica que aprovechando de la embestidura que ostentan abusan y violan a menores de Edad.
El caso de “Pedrito” como le llamo su padre en aras de proteger su identidad, nos consterna e indigna saber que la impunidad no tienes limites en el Estado de Oaxaca, la desatención del caso no es lejana de la impunidad en que aun se encuentran los crímenes cometidos en el 2006, y si al ex gobernador se le han perdonado crímenes de lesa humanidad, la pregunta es ¿Acaso es importante que violen a un menor de Edad?, ¿si no tienen poder político y económico qué le puede importar a un Procurador?.
Cuando sucedió el caso “San Felipe” esta administración se lavo las manos, diciendo que habían sido errores de la administración pasada y hoy cuál será la excusa para que se hayan hecho ojos de hormiga frente a tan aberrante situación, en manos de quién está la procuración de Justicia para niños, niñas y mujeres en Oaxaca.
Frente a esta grave situación les exigimos al Congreso del Estado ya que en su última votación para defensor del Pueblo se desgarraron las vestiduras por el Pueblo, HOY lo demuestren llamando a comparecer el Procurador para que informe porqué no ha actuado.
Y al Poder Ejecutivo le exigimos medidas de protección para garantizar la integridad física y psicológica del menor y su familia, para efecto de que no por las presiones, se desistan de tan valiente acción como fue hacer público su dolor, indignación y petición de Justicia.
Como sociedad no podemos permitir que un ataque a un menor de edad pase como una nota más como un caso más, mantengámonos atentos y atentas al actuar de la Jerarquía Católica, así como del Estado. La carga de la prueba no se la pueden imponer al menor, es obligación del Estado Investigar y Sancionar.
¡No más violencia contra niñas y niños!
¡Una llama encendida por los Derechos de los Pueblos!
Isaac Torres Carmona
Limeddh Filial Oaxaca
