Uno de los grandes retos del nuevo rector de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO) es desmantelar la gran corrupción heredada por su antecesor Rafael Torres Valdez, quien en su desesperación para imponer a Josefina Aranda Bezaury no le importó regalar tiempos completos y solapar los desvíos de algunos directores.
Por: Filadelfo FIGUEROA
Para empezar uno de sus hijos recibió tiempo completo en la Escuela de Veterinaria, en la misma situación se encuentra OIivia Ibañez, quien fuera su pareja sentimental y no le importó en la agonía de su rectora nombrarla secretaria de la rectoría.
Eduardo Martínez Helmes deberá revisar en que condiciones se entregaron los tiempos completos, y revocar aquellos donde se haya violentado la normatividad universitaria.
Fueron 222 días en que durante el rectorado de Rafael Torres Valdez se suspendieron las actividades académicas y administrativas por conflictos, más que un año escolar, es como si la UABJO hubiera estado cerrada durante más de un año.
En el caso de las obras, constructoras beneficiadas con ellas entregaron grandes cantidades de dinero para la campaña de Josefina Aranda Bezaury, lo malo es que ahora meterán materiales de mala calidad para que el dinero que recibieron para su realización les alcance.
Por ello a Rafael Torres Valdez no le importó romper con todos sus aliados para imponer a Francisco Ramos Reynoso como Abogado General, dentro de los espacios negociados por la candidata perdedora Josefina Aranda Bezaury.
Cuando ya se había pactado con Evencio Martínez que el Abogado General sería Pedro Celestino, Torres Valdez dijo que no, y ahí mandó a Reynoso para que le cubra las espaldas, bueno lo poco que pueda lograr.
En esta tarea poco le podrá ayudar la Secretaria General, Leticia Mendoza Toro, quien dentro de sus sueños quería que este cargo lo ocupara su hijo Nahúm Carreño, y quien ocupó sus espacios poniendo ahí a toda su familia, hasta una nieta ya apareció en la rectoría.
