EL HORROR DEL CRIMEN ORGANIZADO REFLEJO DEL GOBIERNO MEXICANO.-Nos espantamos de ver a individuos degollados, descuartizados, colgados de puentes, muertos en tortura, pero es una realidad que forma parte del México Moderno, eso que ahora nos enteramos a través del poderosísimo medio de comunicación como es el internet siempre ha ocurrido.
Por: Filadelfo FIGUEROA
Pero eso es lo que le aplicaban a los integrantes de los grupos armados en los años 60 y 70; así los mataban; en las cárceles recibían las peores torturas, eso es parte del Gobierno Mexicano.
Por eso si revisamos la trayectoria de Heriberto Lazcano “El Lazca” nos damos cuenta que es una creación del mismo gobierno para combatir precisamente a los grupos armados, a quienes utilizaron por ejemplo en contra de los zapatistas.
El Lazca es resultado del binomio Ejército Mexicano-Ejército Norteamericano, sólo que tanto él como otros delincuentes se les salieron de control y con los resultados de más de 60 mil muertos en el sexenio de Felipe Calderón.
La guerra salvadoreña dejó 70 mil muertos en una década, nosotros este número lo tenemos en un sexenio.
El 5 de julio de 1993, Lazcano fue ascendido a cabo de Infantería. El también llamado “Verdugo” recibió las asignaturas de Fuerzas Especiales, Operaciones de Intervención, Contraterrorismo, Francotirador, Protección de Funcionarios, Seguridad Integral y Guerra Anfibia.
Recibió entrenamiento del ejército gringo al nivel que a kaibiles, soldados de élite del Ejército de Guatemala y a talibanes afganos.
En el caso de la guerra sucia en México por ejemplo está el caso de : Elisa Irina Sáenz Garza (1946-?) es una de las grandes heroínas semi-anónimas de la historia mexicana contemporánea. Maestra de kínder, socialista, revolucionaria, Elisa fue detenida por el ejército mexicano el 21 de marzo de 1974 en la Selva Lacandona de Chiapas y fue torturada, violada y sometida a toda clase de tratos crueles, inhumanos y degradantes. El gobierno de Luis Echeverría le negó el derecho a una defensa jurídica, la encerró en las mazmorras clandestinas del Campo Militar No. 1 y nunca la presentó ante ninguna autoridad judicial. Los subsecuentes gobiernos del PRI y el PAN se negaron a investigar y castigar a los responsables de este crimen de lesa humanidad.
Hasta el día de hoy, Elisa se encuentra en calidad de detenida-desaparecida, sin que absolutamente ninguna autoridad haya explicado su paradero, ni el de otros 1500 desaparecidos políticos de la llamada “guerra sucia”.
EN MEXICO UNA GUERRA DE CUARTA GENERACION.– El ideólogo de ultraderecha estadounidense, especializado en teoría militar, William S. Lind, hizo una clasificación de las guerras modernas por generaciones. La cuarta generación, que es la que más nos interesa, representaría una ruptura radical con las guerras convencionales, pues los Estados pierden el monopolio de la violencia y hacen frente a unidades irregulares, grupos guerrilleros y células terroristas, cuyas estrategias de combate son ajenas por completo a las de la guerra convencional.
Así, aún cuando en su aparente esquizofrenia Calderón acepte algunas veces que estamos en guerra y otras lo niegue, lo que se está viviendo en México es, sin lugar a dudas, una guerra de cuarta generación. El Estado neoliberal ha permitido que la narco-oligarquía organice sus propios ejércitos paramilitares y, peor aún, que éstos tengan dominios territoriales exclusivos.
La militarización del país no tiene que ver con recuperar esas zonas perdidas, por el contrario, en territorios disputados entre los cárteles, el ejército ha intervenido intentando inclinar la balanza hacia alguna de las partes.
Por eso Felipe Calderón fue a una guerra en contra del narcotráfico sin haber depurado al ejército, la marina, los cuerpos policiacos infiltrados completamente por el crimen organizado.
