*La estrategia nacional de seguridad y las políticas en la materia durante los últimos años, no han logrado reducir los niveles de incidencia delictiva, alertan
*Se ha generalizado la comisión de los delitos que más afectan a la ciudadanía en prácticamente todas las entidades federativas de la República, a niveles muy superiores a los que había en 2006
*Necesitamos la implementación de una verdadera política nacional de seguridad que tenga como principal objetivo la reducción de la incidencia de los delitos de alto impacto
México DF a 15 de noviembre del 2012. El Observatorio Nacional Ciudadano por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad hizo un enérgico llamado al presidente electo, Enrique Peña Nieto; a los legisladores de la LXII Legislatura, a los Gobernadores entrantes y en general a todas las autoridades a replantear de manera urgente la política de seguridad, con el fin de que ésta se oriente de manera definitiva y prioritaria a reducir los índices de la delincuencia común, especialmente en los delitos de alto impacto.
En conferencia de prensa, el coordinador general del ONC, Héctor Larios Santillán, advirtió que en los último seis años, los delitos que más afectan a la ciudadanía se han disparado hasta alcanzar niveles insostenibles, lo que daña seriamente las bases de nuestra estructura social si consideramos que la seguridad es un pilar fundamental del Estado de Derecho y del desarrollo integral de una sociedad.
“Este llamado toma en cuenta que a pesar del enorme esfuerzo que se ha hecho para tratar de abatir los actos delictivos, la estrategia nacional de seguridad y, en general, las políticas en la materia durante los últimos años, no han logrado reducir los niveles de incidencia delictiva, antes al contrario, esta ha ido en una tendencia creciente”, comentó el líder ciudadano.
Al presentar el V Reporte de Monitoreo de Delitos de Alto Impacto, que abarca el periodo del mayo a agosto del 2012, los representantes del ONC exigieron, en nombre de las organizaciones ciudadanas que lo integran, el diseño y la implementación de una política nacional de seguridad que tenga como principal objetivo la reducción de la incidencia de los delitos de alto impacto y que cumpla con las siguientes consideraciones:
* Que tenga un enfoque de seguridad ciudadana, donde la actuación de las autoridades cumpla con las exigencias de respeto a los derechos humanos de las y los ciudadanos.
* Que cuente con mecanismos de participación ciudadana institucionales y con los cuáles se garantice una verdadera rendición de cuentas.
* Que se apoye en la generación de una información accesible, oportuna y objetiva.
* Que garantice la plena coordinación entre las instancias de la Administración Pública Federal así como entre éstas y las autoridades de las entidades federativas y los municipios.
* Que privilegie la prevención del delito.
* Que atienda los impactos de violencia que resquebrajan el tejido social.
En su oportunidad, Ricardo Sepúlveda, Director General del ONC, comentó que de acuerdo con los datos de las denuncias de los delitos de alto impacto social, se percibe que la delincuencia común se ha estabilizado en niveles históricos que son muy superiores a los existentes durante 2006, además de que con base en la observación periódica a través del monitoreo de delitos se puede confirmar que la criminalidad de tipo común es ya un fenómeno generalizado en todas las entidades del país y se encuentra distribuida a lo largo y ancho del territorio nacional.
“Por ejemplo, hay estados como Guanajuato, en los que tradicionalmente no encontrábamos un crecimiento de la denuncia como el que presentaron este cuatrimestre con un incremento de más del 53 por ciento; lo mismo que Zacatecas, que creció 44 por ciento la denuncia, o Yucatán que vio incrementarse su índice de denuncia hasta 35 por ciento; este dato, a pesar de que sólo se refiere a la denuncia es significativo para conocer el comportamiento delictivo en el lugar, especialmente en aquellos delitos donde la cifra negra no es tan alta”, explicó.
El especialista en derechos humanos enfatizó que hay cuatro entidades, a saber: Estado de México, Distrito Federal, Baja California y Puebla que concentran el 46.5 por ciento de las denuncias de los delitos de alto impacto nacionales a pesar de que estos solo agruparon el 29.3 por ciento de la población total de México.
En general, detalló Ricardo Sepúlveda, encontramos que del 1er cuatrimestre al 2do cuatrimestre del 2012 las denuncias de delitos que incrementaron fueron: extorsión, con 22.44 por ciento; homicidio culposo, con 8.9 por ciento; homicidio, con 7.46 por ciento; y homicidio doloso con un 6.43 por ciento. Mientras que las denuncias de delitos que disminuyeron fueron: robo de vehículo, con -5.52 por ciento; secuestro, con -3.64 por ciento y robo con violencia, con una reducción marginal de -0.66 por ciento.
Los representantes del ONC, quienes estuvieron acompañados por otros liderazgos de la sociedad civil como José Tapia, director de investigaciones de México Evalúa y Laura Elena Herrejón, de Movimiento Pro Vecino, entre otros, recordaron que el reporte de monitoreo de delitos busca proporcionar un insumo útil, periódico y oportuno de información para la ciudadanía sobre el comportamiento de la denuncia de los delitos de alto impacto, con la finalidad de enfatizar la necesidad de que se implementen políticas públicas cuyo objetivo prioritario sea la disminución de su comisión, privilegiando la prevención.
