Ante la represión y la persecución política contra aquellos quedisienten de laspolíticas neoliberales, las organizaciones socialesalzamos la voz para exigir que se detenga la monstruosa estrategiaestatal y federal de sembrar el terror y el miedo en la población, con la cancelación de las garantías individuales y los derechos humanos, creando un estado de excepción a lo largo y ancho del país. El gobierno estatal y federal ha dispuesto de un entramado que conjuga en la actividad persecutoria a las fuerzas policíacas, militares, paramilitares y a los jueces que actúan por consigna reprimiendo el movimiento social.
De nueva cuenta los compañeros de organizaciones sociales y activistas
son agredidos. Tal es el caso de la Desaparición Forzada de los
compañeros Leonel Manzano Sosa Asesor y proyectista de FACMEO, Frente
Amplio de Comunidades Marginadas del Estado de Oaxaca; Mario Olivera
Osorio, Secretario Técnico del nivel de primarias en el IEEPO,
integrante de la Comisión Política del FACMEO, Lauro Atilano Grijalva
Villalobos, director de escuela primaria y Regidor de Educación en
Santa María Jalapa del Marqués, compañero de la Coordinación Política
del FACMEO en la región del Istmo; Sara Altamirano Ramos candidata a
la presidencia municipal de Santa María Jalapa de Marqués.
El día viernes 17 de mayo se encontraban los compañeros en la ciudad
de Oaxaca reunidos, para ver la logística de la candidata de Jalapa de
Marqués, cuando fueron detenidos-desaparecidos por la Policía Federal.
La detención-desaparición violó sus derechos humanos y garantías
individuales; los compañeros fueron detenidos-desaparecidos en el
estacionamiento de Plaza Oaxaca, el viernes 17 de mayo alrededor de
las 18 horas. Toda la noche del viernes permanecieron en Oaxaca, hasta
el sábado al medio día fueron trasladados en avión a la ciudad de
México, en donde los mantuvieron incomunicados hasta el domingo 19,
cuando la PGR presenta las fotografías de los primeros cuatro, y el
compañero Leonel Manzano Sosa fue presentado hasta el lunes 20.
El indígena mixe, Damián Gallardo Martínez fue detenido-desaparecido
en su domicilio a la una y media de la mañana el sábado 18 de mayo,
corriendo la misma suerte que los miembros de FACMEO.
No solamente el detenido-desaparecido es víctima de violación de
derechos humanos, también los familiares son víctimas; es el caso de
la esposa del compañero Leonel Manzano Sosa a la que le impidieron
verlo, se le permite el acceso hasta el martes 21 del mes en curso en
la noche, fue cuando pudo observar la tortura física y psicológica a
la que había sido sometido su esposo.
El miércoles 22 mientras los familiares del compañero Leonel Manzano
Sosa se encontraban afuera de la SEIDO, su casa en la que se
encontraba una de sus hijas y su cuñada, era cateada con lujo de
violencia por personal de la PGR, de donde sustrajeron documentos de
la familia y objetos de valor.
Lo anterior se suma a la Desaparición Forzada de nuestro compañero
Carlos René Román Salazar, Guadalupe Pérez Sánchez y demás
desaparecidos en años anteriores; el asesinato del compañero Rafael
Vicente Rodríguez Enríquez, Secretario de Organización del CES durante
el periodo 1995-1998 y de Bernardo Vázquez Sánchez luchador, social de
San José del Progreso, tan sólo por mencionar lo más reciente;
acontecimientos cuyos efectos aún están presentes en nuestra realidad,
a pesar de que se trate de extender un manto que lo oculte a los ojos
de una opinión pública confundida por una intensa campaña de medios
que pretende, vanamente, instalar en la memoria colectiva la impresión
de que en Oaxaca y en el país, ya no hay lugar para movimientos
sociales auténticos, fuera del control del sistema político vigente.
Las organizaciones sociales como FACMEO, se han convertido en una
alternativa de organización para los trabajadores del campo y la
ciudad. La única posibilidad del gobierno para detener el avance y la
organización del pueblo es la represión: militarizan el Estado,
recurren a la desaparición forzada de personas, fabrican delitos,
torturan, aprehenden injustificadamente, extorsionan y asesinan,
incluso utilizando grupos paramilitares.
Nuestros compañeros no han cometido ninguna falta que amerite castigo.
En el fondo se les pretende negar el derecho a disentir y el respeto a
las maltrechas garantías constitucionales.
Pretenden negarnos el derecho a una vida digna, el acceso a la
alimentación, la salud y la educación, pues los convierten en objetos
inalcanzables para las clases populares.
Exigimos que el gobierno estatal y federal se desistan de todas las
acusaciones contra profesores, estudiantes y luchadores sociales, que
ponga en libertad absoluta e inmediatamente a todos los compañeros
detenidos arbitraria e ilegalmente a partir del día 17 de mayo por la
tarde, de igual forma a todos los presos políticos y de conciencia y
presente con vida y en libertad a los desaparecidos, que detenga la
represión y persecución política contra las organizaciones sociales y
castigue a los autores materiales e intelectuales de los delitos de
lesa humanidad contra nuestro pueblo.
Atentamente:
Frente Amplio de Comunidades Marginadas del Estado de Oaxaca, FACMEO
Oaxaca de Juárez, Oaxaca; 26 de mayo de 2013
