Edmundo REYES AMAYA y Gabriel Alberto CRUZ SÁNCHEZ, fueron víctimas de desaparición forzada, hace 7 años, el viernes 25 de mayo de 2007 en la ciudad de Oaxaca, México; este delito de lesa humanidad es un crimen en el que no se puede tolerar la impunidad porque lesiona a toda la humanidad y la pone en inminente riesgos de que los hechos se vuelvan a repetir.
Así sucedió, las indígenas de la región Triqui, Oaxaca, Daniela y Virginia ORTIZ RAMÍREZ de 14 y 20 años de edad respectivamente, sufrieron desaparición forzada el jueves 05 de julio del mismo año 2007; en ese mismo año, el 30 de diciembre en la Sierra Sur del mismo estado de Oaxaca, el indígena chatino Lauro JUÁREZ, era víctima también de desaparición forzada. Eran gobernador del estado de Oaxaca Ulises RUIZ ORTIZ y Presidente de la República Felipe CALDERON HINOJOSA. Estos hechos se sumaban a las 27 víctimas mortales causadas a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca, APPO; a los cientos de detenciones arbitrarias; a las torturas físicas y psicológicas; a los encarcelamientos masivos por motivos políticos; al desplazamiento forzado de la población en el gobierno represor de Ulises RUIZ ORTIZ.
Esto era sólo el preludio de la llamada Guerra contra las Drogas iniciada por el gobierno de Felipe CALDERÓN HINOJOSA, guerra en la que en los últimos 8 años el pueblo mexicano ha sufrido más de 90 mil muertes de hombres y mujeres, niños y ancianos; una verdadera guerra donde a las miles de desapariciones, se suman las desapariciones forzadas y las ejecuciones extrajudiciales por motivos políticos en el estado de Oaxaca, ahora en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo, la desaparición forzada del profesor Carlos René ROMÁN SALAZAR ocurrió el lunes 14 de marzo de 2011, a tan sólo 3 meses y medio de haber iniciado su sexenio; le seguiría la desaparición forzada del profesor Guadalupe Pérez Sánchez el sábado 14 de mayo de ese mismo año 2011; la persecución, el encarcelamiento, las masacres, las ejecuciones extrajudiciales de líderes de organizaciones sociales y de defensores de derechos humanos no han tenido fin en este gobierno donde se ha hecho manifiesto el terrorismo de estado.
El compañero Daniel SANTIAGO MATÍAS, era detenido de manera arbitraria y a todas luces ilegalmente, aquél 25 de mayo de 2007; después de horas de torturas físicas y psicológicas, incluida la amenaza de arrojarlo desde un avión al mar si no confesaba ser miembro de la guerrilla del Ejército Popular Revolucionario y denunciaba las acciones de la guerrilla y a quienes conocía en la Región Loxicha; el entonces comandante Daniel CAMARENA FLORES, director de la entonces Policía Ministerial del Estado, en su papel de policía bueno, sabedor de la inocencia del compañero lo deja en libertad, advirtiéndole que tenía que cuidarse porque en el orden federal sí tenía orden de aprehensión; es obvio que esta detención y torturas estaban vinculadas a la desaparición forzada de Edmundo REYES AMAYA y Gabriel Alberto CRUZ SÁNCHEZ; desde entonces, Daniel SANTIAGO MATÍAS vive desplazado de su comunidad en la Unión Americana, a pesar de esto, a mediados del año 2011, quienes se dijeron investigadores del gobierno federal fueron a buscarlo a su comunidad de Tierra Blanca San Vicente, Loxicha, para interrogarlo sobre lo que le habían preguntado sus torturadores aquél 25 de mayo de 2007; a los actos de hostigamiento contra su familia se han sumado las ejecuciones extrajudiciales, el miércoles 15 de mayo de 2013 fue ejecutado su cuñado, el compañero Félix MARTÍNEZ SANTIAGO y expulsada de su comunidad a fuerza de agresiones directas con armas de fuego en su domicilio toda la familia, el compañero Félix era un activo participante en la búsqueda de la libertad de los Presos Loxicha, defensor de derechos humanos y activista político en la Región Loxicha de nuestra organización, la Organización de Pueblos Indígenas Zapotecos, OPIZ.
Ya se esperaba una agresión en mi contra, pero nunca imaginé su magnitud y mucho menos que atentaran contra toda mi familia, desafortunadamente, en una guerra se cometen todo tipo de crímenes y los niños y las mujeres son los más vulnerabilizados.
El 16 de octubre del año 2013, ha dejado marcadas nuestras vidas para siempre, pues a la desaparición forzada sufrida el miércoles 15 de julio de 1998, la posterior presentación con vida en prisión, prisión que se prolongó por tres años; el intento de ejecución cuando era acompañado por mis tres menores hijos y mi esposa, nos ha lanzado al desplazamiento forzado.
Sin embargo, desde nuestra humilde condición de defensores de derechos humanos, no cejaremos hasta lograr que los crímenes de lesa humanidad sean investigados, perseguidos y castigados con el más estricto apego a derecho.
Que no haya un lugar del mundo donde Diódoro CARRASCO ALTAMIRANO, Ernesto ZEDILLO PONCE DE LEÓN, Ulises RUIZ ORTIZ, Felipe CALDERÓN HINOJOSA y todos quienes cometen delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra puedan escapar a la Justicia Universal, esto incluye a Gabino CUÉ MONTEAGUDO y Enrique PEÑA NIETO, actuales Gobernador del estado de Oaxaca y Presidente de la República Mexicana, respectivamente, quienes por comisión u omisión, entran en esta ominosa categoría.
No omito recordar que a pesar del Informe Especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de febrero de 2003 por El Caso Loxicha y la Recomendación 7/2009 de la misma Comisión Nacional de los Derechos Humanos por la desaparición forzada de Edmundo REYES AMAYA y Gabriel Alberto CRUZ SÁNCHEZ, existen hasta nuestros días 8 presos indígenas desde 1996 por El Caso Loxicha y Edmundo REYES AMAYA y Gabriel Alberto CRUZ SÁNCHEZ, siguen desaparecidos.
¡PORQUE VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!
¡PRESOS POLÍTICOS Y DE CONCIENCIA, LIBERTAD!
Juan SOSA MALDONADO
Defensor de derechos humanos
Domingo 25 de mayo de 2014
