Son tiempos electorales y la guerra sucia apenas comienza; a falta de propuestas, las redes sociales, los medios de comunicación y principalmente los chismes, dimes y diretes, darán mucho de qué hablar en la agenda mediática.
Y el ganador para esta contienda electoral tal parece será el menos exhibido; el trabajo y creatividad de un equipo para realizar guerras sucias requieren de un buen financiamiento y mucha creatividad, no solo para elaborar las famosas memes, sino para espiar a los enemigos políticos como hackear sus cuentas personales.
Se requiere, por poner un ejemplo, de un buen equipo humano y material para exhibir a Benjamín Robles mediante un vídeo escandalizando su vida privada y pública. Se requiere un buen equipo para clonar cuentas y falsear información de cualquier candidato. ¿Quién financia?
Se sabe que en el “cuarto de guerra” de José Antonio Estefan Garfias se han filtrado funcionarios del actual gobierno de Gabino Cué, entre de ellos el siempre cotizado, autonombrado maestro de la pluma, Miguel Ángel Muñoz, quien está a cargo del área de comunicación gubernamental.
Ahora pretende mediante amenazas amedrentar a los periodistas a cubrir eventos de Estefan Garfias o en caso de no hacerlo, les retirará el convenio de Gobierno del Estado, así de honesto y limpio este personaje.
Otro que teniendo maestría, cuentan las malas lenguas obtuvo su maestría con ayuda de colaboradores del CIEDD, es decir, el solo presento su cara, ya que la investigación y trabajo de escritorio lo hicieron sus empleados, es el Secretario Particular del Gobernado, Moisés Bailón Jiménez, su único mérito de llegar a donde está no es su brillante capacidad como funcionario público, sino ser hijo de quien es y ser amigo de Diódoro Carrasco, ex gobernador de Oaxaca, al igual que Miguel Muñoz.
Tiene que haber alguien que tape todos los robos, tranzas y demás atropellos que causo Gabino Cue a Oaxaca, por eso Estefan Garfias está y seguirá financiado por funcionarios estatales.
