Para empezar hay que recapitular un poco, actualmente el flamante edil de filiación Morenista ha decepcionado incluso a su mismo partido, primeramente por su soberbia y Aires de grandeza, aunado a que en su equipo de incondicionales sólo hay personas que si bien tienen la capacidad, simplemente no les da la gana dar resultados.
Si bien los problemas, gustos e incluso los vicios son meramente personales, sin embargo tal pareciera que al actual y al anterior presidente municipal capitalino, los convencieron de que para poder ser un buen edil tenían que agarrar la copa a mañana, tarde y noche, los 365 días del año, lo cual ha hundido solamente al municipio de Oaxaca de Juárez en general.
La actual y la anterior administración simplemente llegaron a tirar a la basura las esperanzas que depositaron con su voto los ciudadanos de la capital oaxaqueña.
Si bien es cierto que la sociedad dice estar harta del PRI, simplemente es porque ven el inmediato periodo priísta, pero tan solo hay que recordar que antes de él, estuvo otro priísta. ¿Que pasó ahí entonces?, Si la gente ya no quiere al PRI, entonces ¿por qué votó para que ganara el trienio 2014-2016 y continuara en el periodo 2017-2018?
La respuesta es simple, por los resultados de José Javier Villacaña Jiménez, actualmente Senador Suplente, ex secretario de Administración, Ex Diputado de la LXI Legislatura donde fungió como Presidente de la mesa Directiva.
En 2014 la sociedad le brindó su confianza, la cuál respondió con resultados, mismos que hicieron que la gente creyera nuevamente en el Partido Revolucionario Institucional, sin embargo, las malas decisiones de su sucesor crearon nuevamente el descontento social a ese el PRI.
Entonces, ¿que quiere la gente?, ¿Un “cambio” que solo se da en el discurso, o a una persona que ha probado saber hacer bien las cosas, pero sobre todo que tiene un verdadero compromiso con Oaxaca de Juárez?
Si bien es cierto que se crítica que se tiene que dar la oportunidad a cuadros nuevos al interior de todos los partidos, darle la oportunidad a mujeres y a jóvenes, ahora lo que Oaxaca necesita es una persona que quiera el bien común, que sepa lo que hay que hacer para que a Oaxaca le sucedan cosas buenas otra vez.
